Esparta

Bueno aquí tenemos la primera entrada del blog, hablare un poco sobre la ciudad estado de Esparta algunas de sus costumbres, festividades religiosas, sociedad, politica y algunas cosas mas.

Primero que todo me parece importante saber donde estaba ubicada Esparta, esta se encuentra en la Peninsula del Peloponeso a orillas del río Eurotas, es importante mencionar que Esparta se encontraba entre dos cordilleras, las cuales terminan en dos peninsulas y estas mismas son las que limitan el golfo Lacónico.

La peninsula del Peloponeso, al sur se encontraba Esparta

Los lideres políticos de esparta eran los dos reyes, cada uno de ellos pertenecientes a diferentes familias las cuales no se podían casar entre ellas, la función de estos reyes era principalmente religiosa y militar ellos tenían mayor rango que cualquier otro general en el campo de batalla incluso podían declarar treguas, otros personajes importantes en la política de esparta eran los Éforos existían cinco de ellos los cuales se renovaban cada año estos controlaban la recaudación de impuestos, el entrenamiento de los jóvenes militares, el calendario entre muchas cosas mas.

La sociedad espartana básicamente se dividía en tres clases, los ciudadanos entre los que se encuentran los espartiatas quienes eran los hijos de padres espartiatas, ellos eran la minoría pero tenían el poder político y militar de esparta y solo se encargaban de la guerra, cualquier trabajo manual o de la tierra era denigrante para ellos, los periecos: ellos eran extranjeros que vivían en Esparta, se encargaban de las artesanias y el comercio y los ilotas quienes no eran considerados esclavos sino simplemente siervos del estado quienes se podían casar, tener hijos y cultivar su tierra.

La religión de los espartanos era la religión griega, cabe mencionar que eran politeístas, es decir que tenían muchos dioses, en Esparta la religion ocupaba un papel importante en la sociedad incluso mas que en otras ciudades estado griegas, existían varias celebraciones religiosas las cuales eran tomadas con mucho respeto como la festividad de Carneas en la cual los espartanos tenían la obligación de celebrarla por encima de cualquier otra actividad. (gracias a la cual existe la famosa batalla de las Termópilas, de la que después se hablara), las Jacintias en las cuales se veneraba a Jacinto (héroe de los espartanos) y duraban tres días en los cuales se celebra su muerte y renacimiento, entre otras.